El proyecto tenía un triple objetivo:

- dar respuesta a las necesidades habitacionales y espaciales familiares,

- incorporar la luz natural como elemento integrador y vertebrador de los espacios, tanto interiores como exteriores,

- y obtener una alta calificación energética (A), reduciendo los costes de uso y mantenimiento de la vivienda.

La vivienda se ordena de forma sencilla y funcional, mediante la yuxtaposición de dos piezas en forma de cruz alargada; la primera pieza alberga dos niveles, la planta sótano y la planta baja, siendo esta última la que durante la mayor parte del tiempo permanecerá habitada por la familia; la segunda pieza alberga un solo nivel, la planta primera o planta alta, la cual se convierte en el espacio multifuncional on/off, en el que poder disfrutar y relajarse, con vistas excepcionales de la sierra circundante. Las dos piezas están conectadas espacial y visualmente.

La orientación de ambas piezas está escrupulosamente cuidada, de manera que se obtienen altas ganancias energéticas solares en invierno, y por contra, reducidas en verano.

La vivienda cuenta con una calificación energética A, lo que permitió al cliente ahorrar una considerable cantidad económica en la concesión de la licencia de obra y, lo más importante, le permitirá obtener un mayor confort térmico en su vivienda, con un coste energético muy bajo.

El resultado es una arquitectura minimalista, que se adapta a las condiciones climáticas del lugar, con un diseño eminentemente pasivo desde el punto de vista energético.

Localidad: Celrá, Girona (España)

Estado: Construido

Equipo:

- Luis Gala, Arquitecto

Cliente: Privado